lunes, 13 de marzo de 2017

Yo, todos los días.


Me he mirado hoy en el espejo para decirme lo mucho que siento el ser como soy, mezclado con un falso: “Estás cada día más guapa (distinta)”.

Me he asomado hoy a la ventana para comprobar si llovía ahí afuera tanto como predecía que ocurriría aquí dentro.

Me he probado hoy un vestido de flores con el que algún día me sacaré a pasear por Madrid. Y tú no me ayudarás a desabrocharme los botones al final de la noche.

Me he bebido a gritos la falta de horas de sueño con las que planeo sobre mi cama vacía. Esta no volveré a ser yo.

_Estás cada día más guapa.
_Error. Distinta.
_No entiendo.
_Adiós.

Me he comprado una libreta vacía para escribirte versos sin rima ni poetisa.

Cuando la abras, buscarás en mis ojos el sentido.

Y si con cada día que paso estoy más guapa, los ojos a los que mirabas ayer no serán los de la misma chica inerte a la que intentarás descifrar mañana. Creo que no me entiendes.

Te acabo de responder sin necesidad de escuchar tu desinteresada pregunta.